Los camiones también saben correr y además en el Dakar

Iveco, Kamaz, Renault, Tatra, Man, Scania… sí, te suenan estos nombres de verlos en la carretera cuando les adelantas en una autovía, o cuando vas detrás de ellos en una carretera de doble sentido. Y sí, son marcas de camiones que hace prototipos o adaptan algunos de sus modelos para correr el Dakar.

Camión Dakar

La categoría de camiones en el Dakar es una de las cosas más espectaculares que puedes ver en el mundo del motor. Y lo digo, teniendo en cuenta que yo lo veo en la televisión. Tener la oportunidad de verlos correr en directo, tiene que ser incluso escalofriante. Máquinas con motores, chasis y suspensiones que les hacen subir y bajar dunas como quien va por una carretera asfaltada.

Dentro del Dakar hay varios tipos de camiones, con diferentes categorías. Se pueden dividir en camiones de 2 ejes o de 3 ejes. Están los camiones que hacen asistencia, los camiones que se juegan el título, los camiones que hacen de «mochileros«, como se dice en las motos, a los principales candidatos al título. Evidentemente no es lo mismo ser de uno o de otro. Si estás corriendo por el título llevarás el peso justo, al gramo, y alguien por detrás con todos los repuestos necesarios. Si eres de asistencia vas cargado hasta la última esquina con una tonelada o dos más, con todos los trastos tuyos y de tu compañero o de quien haga falta.

Para mi, lo más fascinante de la competición es que están limitados a 140km/h y todo lo que ello supone. Si los dejasen correr estaríamos hablando de 200km/h. Pero es que no son 200km/h en carretera, son sobre caminos, pistas, campo a través, arena, barro, fesh-fesh (pero ¿qué es el fesh-fesh? Aquí te lo cuento). Para poder permitirse semejantes velocidades, estos camiones tienen potencias que se acercan a los 2000 CV (aunque no nos lo quieran decir) y un par motor en torno a los 500 Nm. Los pesos mínimos son de 8500 kg. Las cajas de cambio hasta hace poco eran manuales, ahora ya van evolucionando y se van introduciendo las automáticas.

Sin la limitación de 140km/h es muy probable que estos camiones serían los ganadores absolutos de muchas etapas. Ganadores sobre coches, motos y cualquier otro tipo de vehículo que participe. Su paso por muchas zonas es mucho más fácil por su altura y potencia. Pero no todo son ventajas, porque todo es muy bonito hasta que te quedas en una duna y tienes que «palear» un metro cúbico de arena durante 1 hora. O pinchas una rueda que tiene un diámetro igual a tu altura.

Los camiones del Dakar son los principales culpables de que me tengan todos los años pegados a la televisión.

El Dakar de Marc Coma

Me acuerdo aún de aquella edición en la que Marc Coma clamaba contra la organización por la gestión de condiciones atmosféricas. Fue capaz de hablar con la mitad de los pilotos punteros de motos de aquella edición, con el objetivo de ponerse de acuerdo con respecto a la situación que tenían en frente. Ese día me pregunté quien hacia los recorridos, como lo gestionaban los cambios de etapas. Además, dejo ver la capacidad de gestión y el conocimiento que tenía de la situación y la carrera como organización por parte de Marc Coma; si bien es cierto que no era ni la primera ni la segunda vez que corría la prueba. Por ello, que el año pasado dijeran que entraba a formar parte de la organización de la carrera no fue una gran sorpresa.

marc-coma

A mediados de enero terminó la edición del 2016 y comenzó el trabajo de Marc Coma como director de carrera del Rally Dakar. Él sería el encargado de gestionar la carrera, crear el recorrido, definir las etapas. Después de un año de trabajo y de plantear las cosas a su manera, se tiene lo que se ha visto en los primeros días del año, un rally que se parece poco a la edición anterior.

Marc Coma ha decidido darle la vuelta a la edición del 2017, para que se parezca un poco más a lo que era el Dakar. La navegación vuelve a tener más importancia que el correr mucho. Se ha inventado un recorrido complejo, con muchos cambios de rumbo y con el menor número de pistas posibles. Además ha cambiado el sistema de GPS para marcar los Way Point escondidos (o puntos de control) de manera más compleja. Todo esto ha resultado en que todos los pilotos, del más experto al más principiante, se hayan perdido en algún punto. Y no es un decir, Stefan Peterhansel, actual piloto de coches que ha ganado 13 ediciones del Dakar con la de este año, se perdió en la etapa 5 durante unos 20 minutos aproximadamente. Otros grandes navegantes también se han perdido como Moi Torrallardona (copiloto de Gerard de Roy en camiones), Lucas Cruz (copiloto de Carlos Sainz) o Joan Barreda.

Cabe destacar que con el aumento de la complejidad de la navegación, de los road books (libros de ruta) e incluso del propio recorrido, se ha disminuido el ritmo de la competición. Los participantes tienen que ir más despacio, disminuyendo el riesgo de grandes accidentes causados por las altas velocidades.

Si a mi me preguntas por como he visto la prueba este año, te diré que me gusta más que las últimas ediciones. Aumenta la emoción la posibilidad de que un día a otro la clasificación no se parezca en nada. Me gusta, me gusta lo que ha hecho Marc Coma y como lo ha planteado. Además, me da la sensación de que sabe muy bien lo que tiene en las manos y hacia donde quiere llevarlo.

Con esto, cierro el capítulo Dakar por este año, esperando ya por la siguiente edición.

Esto es el fesh – fesh

fesh-fesh-1Uno de los palabros que más oyes en una retransmisión del Dakar, a la organización de las etapas o en las entrevistas a los pilotos es el famoso fesh-fesh. ¿Qué es? El fesh-fesh se puede definir como:

Arena muy fina que tiene aspecto de superficie sólida, pero que se comporta como un barro o lodo poco compacto.

El fesh-fesh tiene un aspecto parecido a esto cuando lo ves en televisión.

Es decir, tu te lanzas por esa pista que parece fácil y te encuentras en «charco» de arena, en el que entras y es imposible sacar la moto o el coche. Esto se debe a que no es una superficie compacta, por lo que no hay tracción. Lo único que haces al acelerar es sacar arena, lo que implica que te vayas hundiendo un poquito más. Solución: toca sacar la pala y palear.